sábado, 14 de enero de 2012

Disfrutando la ciudad (I)

Como ya dije aquí, me está costando, pero creo que me voy acostumbrando a ella. Y la verdad es que se esfuerza por hacerme sentir como en casa.

Hoy la cosa va de aprender un poco y disfrutar de la ciudad al mismo tiempo. Y de comer rico... y de música...

La mañana se presentó fría y nublada, pero en vez de quedarnos en casa decidimos aprovechar el frío para patear la ciudad, hacer un par de recados y disfrutar de estar juntos. Y todo fue surgiendo.

Lo primero fue curiosear un poco en las "Jornadas de puertas abiertas" del Edificio Sarmiento, parte del Museo provincial y recién rehabilitado, y de ahí fuimos a descubrir a un tal Manuel Quiroga a quien no teníamos el gusto de conocer y que nos dejó gratamente sorprendidos, y al que dicho museo le está dedicando una exposición temporal en el aniversario de su muerte.



¿Sabíais que tuvimos en Galicia, y más concretamente en Pontevedra, a uno de los violinistas más afamados del siglo XX? Yo no, he de ser sincera.

Nació en la ciudad en 1892. Se formó en Madrid y en Paris, y dio su primer concierto con 11 años.
En 1911, con sólo diecinueve años, gana el primer premio del Conservatorio de París, convirtiéndose en el segundo violinista español en conseguirlo, después del gran Pablo Sarasate.

En 1914 llega a Nueva York por primera vez y su carrera no hace más que subir y subir. Da conciertos con los músicos más reconocidos de su tiempo, y en 1915 se casa con la pianista Martha Lehman, ganadora también del mismo premio del Conservatorio de París.

Me cuesta hacerme una idea de la fama que pudo alcanzar, pero hay un dato que puede ayudar. Uno de los objetos de la exposición era una hoja del New York Review, que hablaba de él como "El nuevo mago del violín".

Pero la mala suerte quiso que con 46 años, se cruzara en su camino un camión que lo atropelló en las inmediaciones de Times Square, dejándolo impedido de un brazo, que nunca volvió a mover a pesar de sus esfuerzos. Y tal y como había llegado a lo más alto de la música, cayó en picado y nunca volvió a tocar.

Pero el genio artístico seguía ahí, y prueba de ello son las pinturas que se conservan salidas de su mano, dibujos y caricaturas que  recoge la exposición y a las que se dedicó tras el accidente, además de a componer.

Vivió recluido sus últimos años y en 1959 volvió a su ciudad natal, donde aun compuso alguna obra hasta su muerte en 1961.

El Conservatorio de Música de Pontevedra lleva hoy su nombre.

Después de esta lección mañanera se nos abrió el apetito... y nos encaminamos a uno de los sitios que más me gustan de la ciudad a zamparnos una estupenda Lasagne alla bolognesa... "pero esa es otra historia, y debe ser contada en otra ocasión".


2 comentarios:

  1. ...traigo
    sangre
    de
    la
    tarde
    herida
    en
    la
    mano
    y
    una
    vela
    de
    mi
    corazón
    para
    invitarte
    y
    darte
    este
    alma
    que
    viene
    para
    compartir
    contigo
    tu
    bello
    blog
    con
    un
    ramillete
    de
    oro
    y
    claveles
    dentro...


    desde mis
    HORAS ROTAS
    Y AULA DE PAZ


    COMPARTIENDO ILUSION
    MORLA

    CON saludos de la luna al
    reflejarse en el mar de la
    poesía...




    ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE SIÉNTEME DE CRIADAS Y SEÑORAS, FLOR DE PASCUA ENEMIGOS PUBLICOS HÁLITO DESAYUNO CON DIAMANTES TIFÓN PULP FICTION, ESTALLIDO MAMMA MIA, TOQUE DE CANELA, STAR WARS,

    José
    Ramón...

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  2. Hola! La vida en ocasiones es muy irónica y trunca el futuro de gente tan valiosa. Un placer descubrir tu espacio; te seguiré leyendo. Saludos!

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